Dado que la cultura se compone de tantos elementos, no es de extrañar que existan muchos tipos de cultura organizacional.
Es ahí donde empiezan a surgir patrones que han creado los tipos de cultura organizacional más comunes y que han llegado a considerarse estándares.
Por ello, en este artículo te compartimos los más comunes, y de qué manera puedes evaluarlos, medirlos y transformarlos para el crecimiento de tu organización.
Contenido:
¿Qué es la cultura organizacional?
Una cultura organizacional es la suma de creencias y valores compartidos por los colaboradores de una empresa o institución.
Generalmente, estos valores son establecidos por los líderes y luego comunicados y reforzados a través de diversos métodos.
Lo que en última instancia da forma a las percepciones, comportamientos y comprensión de los empleados y a la estructura de la organización.
La cultura organizacional puede manifestarse de diversas formas.
Por ejemplo, a través de los comportamientos de los líderes, los estilos de comunicación, los mensajes distribuidos internamente y las celebraciones corporativas.
Importancia de elegir una cultura organizacional adecuada
La cultura organizacional es un aspecto importante para lograr el éxito de toda empresa.
Ya que la creación de una cultura adecuada puede fomentar ideas innovadoras, mejorar el rendimiento de los empleados y aumentar su eficiencia.
Al mismo tiempo, crear una cultura organizacional inadecuada puede perjudicar la productividad de la organización en su conjunto.
O producir un ambiente tóxico que puede ser terrible para el bienestar de la fuerza laboral.
Ten en cuenta que el tipo de cultura organizacional que elijas o construyas determinará qué tanto los empleados disfrutarán de su trabajo.
Piénsalo: Si trabajas en un lugar donde la cultura encaja bien, tenderás a desarrollar mejores relaciones con tus compañeros y serás más productivo.
Como resultado, la empresa tendrá un mayor employee engagement, con lo que evitarás los altos costos de la rotación laboral no deseada.
7 tipos de cultura organizacional
En toda empresa, como en todo grupo social, se crea una cultura que puede ser deseada o no deseada como resultado de las interacciones de todos los miembros que colaboran.
Y sobre todo, por el papel de los líderes y de las estructuras.
A continuación te presentaremos los 7 tipos de cultura organizacional más comunes:
1. Cultura organizacional de la autoridad
Se trata de un ambiente en el que cada empleado se enfrenta a todos los demás.
Se valoran la fuerza y la decisión, y todos los líderes son seguros de sí mismos, carismáticos y expertos en proporcionar una dirección clara y decisiva.
Estas organizaciones tendrán una fuerte jerarquía, y pueden sobresalir en la consecución de sus resultados.
2. Cultura organizacional adhocrática
Las organizaciones con un tipo de cultura organizacional adhocrática son flexibles y no están inhibidas por procedimientos y políticas burocráticas.
Se hace hincapié en la innovación y las mejoras constantes, el ritmo suele ser extremadamente rápido y el statu quo, aunque funcione, será cuestionado.
Cuando las organizaciones se hacen demasiado grandes, la cultura adhocrática será menos factible en toda la organización.
Habrán algunas funciones o unidades de negocio que necesitarán más estructura, y moverse más lentamente puede ser mejor para la organización.
Por ejemplo, en las áreas de ética y cumplimiento.
Por lo tanto, la cultura adhocrática puede quedar relegada a unidades específicas para garantizar que la organización siga siendo innovadora y competitiva en el mercado.
3. Cultura organizacional jerárquica
Este tipo de cultura organizacional se define por la estructura, los procedimientos establecidos y los niveles de autoridad.
Los empleados saben con precisión dónde encajan en la cadena de mando:
Quién es responsable ante ellos, a quién rinden cuentas y cuáles son las normas.
En esta cultura es imperativo hacer lo correcto.
Los deberes están claramente definidos y las operaciones tienden a ser racionalizadas.
Este tipo de cultura empresarial les permite gestionar mejor el riesgo, ser estables y ser operativamente eficientes.
Sin embargo, puede impedir que las organizaciones sean innovadoras, ágiles y puedan generar un cambio organizacional efectivo ante las transformaciones repentinas en sus mercados e industrias.
Como resultado, pueden carecer de la flexibilidad necesaria en los mercados actuales y futuros.
4. Cultura organizacional de control
Al igual que la cultura jerárquica, en este tipo de estructura se da importancia a la estructura y a la jerarquía.
Se calculan todos los riesgos y se consideran cuidadosamente todos los resultados antes de emprender cualquier acción.
Este tipo de cultura tiende a atraer a un tipo específico de empleado y a un tipo específico de líder. Los líderes valoran la planificación y el control, y nunca toman una decisión que no esté respaldada por datos.
Esto atrae al tipo de empleado al que le gusta la seguridad y la certeza, y al que le gusta saber quién manda.
5. Cultura de mercado
La cultura de mercado se centra en los márgenes de beneficio y en adelantarse a la competencia.
Está orientada a los resultados con un fuerte enfoque externo para garantizar la satisfacción del cliente.
Tener productos o servicios de primera categoría es fundamental para el éxito de estas organizaciones.
Por lo que existe una demanda constante de ser más creativos y sacar al mercado productos nuevos o mejorados antes que sus competidores.
Aunque este tipo de cultura organizacional puede garantizar la longevidad de la empresa, los empleados suelen agotarse por las altas expectativas y la constante exigencia de producir.
También puede haber menos énfasis en la experiencia de los empleados o en su satisfacción.
Conoce también cómo innovar un producto
6. Cultura organizacional de clan
Las culturas de clan son comunes en las empresas pequeñas o familiares que están creciendo y que todavía no tienen una forma jerárquica. Aquí, los empleados son valorados de igual manera, más allá de sus puestos o experiencia.
Este tipo de cultura organizacional busca fomentar el trabajo en equipo, de modo que todos los empleados se sientan como iguales y estén cómodos a la hora de proporcionar un feedback honesto.
También puede haber un fuerte énfasis en la tutoría, el aprendizaje y un entorno constructivo, ya que las competencias y los valores se transmiten de una generación a otra.
En la cultura de clan suele haber un alto compromiso de los empleados.
Lo que tiene como consecuencia que el servicio a los clientes sea de gran nivel..
El inconveniente de este tipo de cultura es que es difícil mantenerla a medida que la organización crece.
Ya que con la llegada de nuevos integrantes y la creación de nuevos departamentos, las operaciones pueden carecer de enfoque y fluidez.
7. Cultura organizacional de resultados
El objetivo a largo plazo de este tipo de cultura organizacional se centra en los beneficios y el crecimiento.
Tanto de la empresa como de los colaboradores.
En este tipo de organización, los líderes ponen un gran énfasis en los logros, con grandes recompensas para cualquiera que cumpla y supere sus objetivos.
Esto puede dar lugar a una meritocracia, en la que los que más rinden ascienden a la cima.
Pero también puede dar lugar a un ambiente muy competitivo en el que exista la sospecha, el resentimiento y el estrés.
¿Qué tipo de cultura organizacional tiene tu empresa?
Si quieres saber cómo determinar el tipo cultura organizacional que existe en tu empresa, puedes empezar por tomar los siguientes pasos:
1. Pide la retroalimentación de tus colaboradores
El primer paso para medir el estado actual de la cultura de tu organización es escuchar la voz de tus empleados, quienes son las personas que la viven día a día directamente.
Una de las mejores formas de obtener una retroalimentación honesta y de forma eficiente es a través de encuestas en línea que se apliquen de manera sistemática y periódica a toda la organización.
Lo que te ayudará a medir el pulso a nivel general y hacer un análisis efectivo para la toma de decisiones.
Otras alternativas son las entrevistas cara a cara o los grupos focales con empleados de distintos departamentos y niveles.
Lo que te ayudará a tener un panorama más amplio, aunque puede requerir una mayor inversión de tiempo y recursos.
2. Busca lo que permanece igual
Busca los aspectos culturales que han permanecido constantes a lo largo de la historia de la empresa.
Por ejemplo, celebraciones anuales, festejos de cumpleaños, reconocimientos especiales, etc.
3. Determina qué estructura organizacional existe
En una empresa jerárquica, generalmente las personas que hacen el trabajo tienen un estatus inferior a las que deciden qué trabajo hacer.
Una estructura no jerárquica, por otro lado, es un indicio de otras facetas de la cultura organizacional de la empresa.
Ya que esta puede funcionar mejor cuando las empresas aceptan el cambio, son innovadoras y comparten un propósito común.
4. Examina cómo se relaciona tu empresa con sus empleados
La forma en que una empresa se compromete y apoya a sus empleados y a la comunidad que la rodea proporciona una gran visión de la cultura corporativa.
Si se examinan también sus programas de incorporación, incentivos para empleados y gestión del rendimiento, se puede ver el tipo de relación que la organización ha desarrollado con sus trabajadores.
5. Evalúa los valores
En el corazón de la cultura de tu organización hay un conjunto de valores compartidos.
Los valores comunes incluyen aspectos como la orientación a los resultados, a las personas, al equipo, la atención al detalle, la innovación y la competitividad.
A veces están documentados; otras veces son más casuales. Por ello vale la pena comprobar con la dirección y los empleados que los valores están alineados.
6. Examina tus procesos de selección
El proceso de selección de personal y las prácticas de contratación suelen centrarse en las aptitudes de los candidatos.
Sin embargo, el tipo de habilidades que se buscan en un empleado puede decir mucho sobre la cultura organizacional con la que se trabaja, por ejemplo, la “capacidad de trabajo bajo presión”.
¡Mejora tu cultura organizacional!
Ahora que ya conoces qué tipos de cultura organizacional existen y cuáles son algunas de las ventajas y desventajas que tiene cada uno.
Te invitamos a evaluar la cultura laboral actual de tu empresa y a empezar a tomar las medidas necesarias para potenciar su rendimiento o corregirla en caso de que sea necesario.
Recuerda que los empleados son el corazón de toda organización, por lo que mantener una cultura positiva garantizará su permanencia, compromiso y satisfacción, con lo que también podrás alcanzar tus objetivos.
Autor: Equipo QuestionPro LATAM.
El equipo de QuestionPro Latinoamérica está constituido por expertos en investigación y recolección de datos. Ayudamos a cientos de empresas alrededor del mundo ofreciéndoles soluciones tecnológicas para el éxito de sus proyectos.